
No puedo y falta muchisimo para auto considerarme egocentricamente un "experto" en cine asiatico, cuando aún no conozco casi nada del pasado, no conozco mucho de Kurosawa, de los Shawn Brothers, de Ozu, entre otros, por lo que mi "experiencia" se centra masivamente en el cine contemporaneo desde los 90 a la fecha.
Aunque suene ridiculo, si es una preocupación para mi tratar de algún día devorarme todo ese cine del pasado que cimienta la salud de una cinematografia oriental tan en boga hoy en día,
a fin de conocer que nada de lo que me fascina hoy en día es gratuito.
Entonces llego a esta cinta japonesa "Gohatto" dirigida por
Nagisa Oshima que se ubica entre el espacio temporal de mis conocimientos filmicos, pero que extrañamente huele a pasado por su concepción clasica de un tema tan ferozmente varonil para una cultura como la japonesa, pero que guarda un elemento transgresor en su empaque añejo: la homosexualidad.
Todo el mundo conoce a Oshima por el ya clasico "el imperio de los sentidos", un pinku eiga que remecio el mundo por ser una de las peliculas eroticas (no la he visto, es una tarea pendiente) mas impactantes de todos los tiempos y que en su momento fue censurado en su Japón natal, sin embargo, yo llego a esta Gohatto, su última pelicula sin conocimiento previo de nada y bueno, no ha sido tan gratificante como en otros casos, pero por lo menos ha sido interesante.
Gohatto es una cinta que transcurre en plena dinastia Shogun en Japón de 1865 en un templo donde la milicia recluta a jóvenes para convertirlos en futuros samurais. En pleno reclutamiento, dos jovenes, destacan entre los demas,
Hyozo Tashiro un "varonil" samurai que siente debilidad por otro joven guerrero,
Sozaburo Kano un adiestrado joven con rostro angelical y femenino que remece los sentimientos de esa academia de guerreros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario