Si ayer comentabamos el trabajo de Miike en Crows Zero y toda la estela que ha dejado su trabajo, quiero presentarles al alumno aplicado, al que busca con poco hacer mucho, el que llena la pantalla de sangre, personajes bizarros y chicas guapas, un emulo de los Tarantino y compañia, el japones Noboru Iguchi.
Se que es una presentación demasiado rimbombante pero despues de ver The Machine Girl, solo me ha quedado en la cabeza una cosa, la capacidad de reciclar diversos generos como el sexplotation de los 70, el cine de yakuzas y de colegiales de los 80, la comedia bizarra, el gore y la violencia extrema, en un hibrido dificil de calificar pero, en desmedro de esta, muy facil de desechar.
Es que los plagios (o quizas homenajes) son demasiados en esta cinta, la presentación de la cinta, un hibrido de Kill Bill y la ultima de este director americano Grindhouse, en cuanto a coreografia de acción y el uso de los créditos y la escena en la que se enfrenta nuestra heroina a la madre de uno de sus victimas y esa risa nerviosa que nos recuerda a Audition de Takashi Miike y todo ese Gore y sangre que nos trae a la memoria a Ichi The Killer, la escena final emulando a Kitamura en Alive, es lo que hace que este tipo mas que director de cine, sea denominado un reciclador, un director capaz de agarrar todas sus influencias y meterlas a la licuadora y servir el resultado directo a la cara, sin medias tintas a lo que salga y es que quizas en ello, radica lo que deja finalmente esta The Machine Girl: o la odias o la disfrutas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario