Dirigida por Eakasit Thairaat
Un policia absolutamente obsesionado con un criminal decide ir a buscarlo a la selva donde existen oscuras tradiciones que hablan de un monstruo canibal, su tenacidad enfermiza lo llevará a poner en riesgo su matrimonio y hasta su propia cordura en una pelicula que mezcla el terror con las creencias tailandesas.
No soy muy amante del terror, pero si antes Asía era el espejo del buen cine de este genero, el cine americano ha construido una nueva forma de hacer cine de autor a través de este genero, donde este año he visto varias cintas espectaculares como la fantastica Weapons, por lo que el terror actualmente se mide en occidente.
Pero nunca hay que decirle no a nuevas experiencias, por lo que decidi darle una oportunidad a esta cinta tailandesa de la que sabia poco o nada y que al final preferiría nunca haberla visto.
Una pelicula que no tiene una historia solida, las escenas de terror son algo forzadas, las CGI son absolutamente pateticas, las actuaciones absolutamente inexistentes y lo unico que podemos añadir en bien de esta cinta es que por lo menos su director merece una oportunidad porque algunos pequeños logros tiene esta pelicula para no ser un cero rotundo.




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