
El mundo de las drogas en los años 90 en la ciudad portuaria de Busan exploto a raiz de la caida economica de Corea del Sur lo que trajo desempleo y depresión y en donde sus habitantes encontraron no solo un refugio en las drogas, si no un negocio para sobrevivir al hambre a través de la brillante y cristalina metadona.
Esta pelicula es la recreación de esos años, en donde a través de los ojos de un narcotraficante informante de la policia (
Ryu Seung-beom excelente otra vez mas) y de un detective perdido en su venganza personal y en sus miserias (
Hwang Jeong-min) intentan desbaratar a una gran red de narcotrafico, en una simbiosis necesaria pero a la vez asfixiante y violenta.
La cinta comienza detallandanos las personalidades de los protagonistas, ambos supuestamente antagonistas pero tan podridos en el ambiente enrarecido, que cada uno se alimenta del otro para sacar un beneficio. Sang Do, narcotraficante, sabe como "negociante" que para sobrevivir en el mercado debe vender su alma al diablo, es decir, vender información privilegiada a la policia a cambio de libertad para operar su negocio y asimismo, el Detective Do, violento y hasta corrupto, quiere cerrar con exito una venganza personal que le debe a su compañero muerto y a la esposa en vida de este (hoy su mu

jer) contra un narcotraficante peligrosisimo e invisible por lo que requiere de datos que solo los puede encontrar en la calle.
Entonces a través de este buen desarrollo de los personajes, se inicia el camino que deben recorrer ambos personajes para lograr atrapar a este capo de la droga, para ello Sang Do deberá infiltrarse en la organización y de paso sacar su propia tajada de la situación. La pelicula intenta ser una mixtura de generos como el suspenso, la acción, la comedia y el drama, pero ninguno de los sabores mezclados llega a resaltar como para encasillar a la misma en uno de ellos, lo que para muchos puede llegar a ser fastidioso porque no se sabe exactamente a donde va el filme.
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